Cuando se administra el sacramento de la Unción de los enfermos, el efecto que se espera es que, si es la voluntad de Dios, la persona se cure físicamente de su enfermedad. Pero incluso si no hay curación física, el efecto primario del sacramento es una curación espiritual por la que la persona enferma recibe del Espíritu Santo el don de la paz y el coraje para afrontar las dificultades que acompañan a la enfermedad grave o a la fragilidad de la vejez.

La atención pastoral para los pacientes católicos en los hospitales de la zona es compartida por las parroquias locales. Si usted o un ser querido es ingresado en un hospital, informe a la administración del hospital que es católico para que pueda recibir el sacramento de la Unción de los Enfermos y la Sagrada Comunión.

La Sagrada Comunión se lleva mensualmente a los hogares de feligreses ancianos y enfermos que no pueden asistir a Misa. Por favor notifique a la Rectoría para concertar una visita.